- Lo nuestro no puede ser - le dijo él a ella -. ¿No ves que tienes sólo veinte años y yo cuarenta? Te doblo la edad. ¿Te das cuenta? Cuando tú tengas treinta años, yo tendré sesenta; cuando tú tengas cuarenta, yo tendré ochenta, y cuando tú te mueras, yo seré demasiado mayor para cuidarme solo.
1 comentario:
Jajaja, pensar en el futuro no es siempre la mejor de las ideas.
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