Cada vez que hago una cosa, me salta a la vista un pareado. Es una tarea cotidiana, sin gran importancia, y el verso es, como casi todos, simple y sin ingenio: dos nombres de acción que riman en -ón. Pero a pesar de la poca gracia del significante, algo en mí se regocija con el significado, como si uno hubiera sido tocado por la magia del universo para librarlo de una carga que pesa sobre sus semejantes. Y sonrío, complacido. Simultáneamente, no puedo evitar imaginarme la frase coreada como un eslogan de manifestación (sin sentido ninguno, dicho sea de paso). También vosotros podéis imaginarlo: una muchedumbre de personas caminando tras una pancarta y gritando como un solo hombre: ¡Esta operación/ no tiene comisión!
¿No habrá más pareados parecidos en la vida cotidiana? Ahí os dejo la pregunta.
14 comentarios:
"El número que ha marcado
no pertenece a ningún abonado"
"Su tabaco,
gracias" (Ah no, esta no rima).
Por cierto, creo que la imagen de la multitud tras pancartas en blanco gritando lo de la operación/comisión podrías utilizarla para una peli de miedo. Es bastante aterradora (como cualquier manifestación en que la gente grita cosas que no entiende, o sea, la mayoría).
¡Qué curioso! He vuelto a leer la entrada y me he dado cuenta de que tú no decías nada de pancartas en blanco. ¡Hay que ver lo que hace la imaginación!
Se ve que no se te ha ido la fiebre todavía, Sakura.
Por la entrada anterior:
Es viernes y trabajo
Qué pringado soy, ¡carajo!
No vale inventar, Liuva.
Lamento decirte, Álvaro, que sólo hay un tipo de pareados que interesa a la sociedad actual, y esos son los que están adosados.
Con estos pantalones
me sudan los cojones.
Así me ha salido, casi sin pensarlo.
Un abrazo.
Son los de esgrima, ¿verdad, Juan Carlos?
¡Qué chorrada, macho!
¡Pero qué panzá de reír!
"esta operación / no tiene comisión"
jajajajajjajaja
Próxima estación
Gregorio Marañón
Correspondecia con...
Es mi favorita.
Álvaro, ¿qué ha pasado con tu entrada de "ruedas y carros"?
Me he censurado, Sakura, daba demasiada información. Lo malo es que no tengo tiempo de actualizar y lo tengo un poco abandonado.
¡Ah, bueno! Mientras sea autocensura...
¡Ánimo! No te agobies por actualizar, aunque haya algunos que te echemos muuuucho de menos. Je, je.
En el edificio en el que estamos currando, vamos a montar nuestros puestos de trabajo en la oficina del tercer piso, y me parto de risa con el cartel que voy a colgar:
esta cocina, será nuestra oficina.
También me maravilla lo de:
a ver si meo y de paso me la veo
o aquello más grosero de:
la mujer no es fea por donde mea
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